miércoles, 5 de enero de 2011

Con solo recordar su mirada, todo cambia. Hace que no tire la toalla. Hace que sea yo misma. Hace que una tarde de lluvia este iluminada. Hace que tarareé una canción en mi mente. Hace que me sienta segura en el peor de los casos. Hace que no me avergüence de todas las locuras que he cometido, estoy cometiendo y cometeré. Pero sobre todo, hace que este radiante.

2 comentarios:

  1. Me encanta. He leido unas pocas entradas pero no lo dejes...

    Te dejo aqui mi rincón de pensamientos y anecdotas:

    http://vivelelhoyyaprendedelayer.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  2. Gracias! No lo dejaré. Aunque con los pocos seguidores que tengo y los pocos comentarios nose yo... Ahora le echo un vistazo a tu blog ;)
    Un besito!

    ResponderEliminar